De acuerdo con lo publicado por el diario La Mañana de Neuquén, la producción de ese tipo de reservorios alcanza al 20,6 por ciento del total del gas que se extrae en la provincia, y permitió atenuar la declinación de la producción promedio anual que era del 8,3% en 2006.
A partir del año pasado el tight posibilitó un incremento anual del 3,7% del gas que aportó Neuquén al país, según un informe elaborado por Nicolás Gutiérrez Schmidt y Magalí Alonso, de la Subsecretaría de Energía de la provincia de Neuquén. En el primer trimestre de este año, la suba de la producción gasífera fue del 9,2% con respecto al mismo periodo de 2014.
Por otro lado, se encuentran las formaciones shale con Vaca Muerta. Su exploración comenzó a tomar fuerza en 2011, con 23 pozos productores, de la mano de un barril de crudo que se fue acercando cada vez más a los precios internacionales.
En la actualidad, el 19,4 por ciento de la producción de crudo neuquino corresponde al shale, y permitió que en 2014 se cortara con 15 años de caída sin pausa. En 2014 la producción de petróleo creció 1% en Neuquén gracias a Vaca Muerta. Mientras que los yacimientos convencionales tuvieron una declinación anual del 7%.
En el primer trimestre de 2015, el volumen de crudo extraído creció 1,8% con respecto al mismo periodo de 2014.
La mayor parte de las compañías concentran sus inversiones en la ventana de black oil de Vaca Muerta, por lo cual el aporte de gas de la formación es apenas del 5% del total del gas que se extrae en Neuquén